La sonrisa volvió al FC Barcelona, luego de que consiguieron tres unidades el fin de semana pasado, cuando derrotaron al Levante por 3-0. Sin embargo, aunque el resultado fue importante, lo más destacado fue la vuelta de Ansu Fati, el nuevo ‘10′ de la institución.

El canterano blaugrana se mantuvo fuera del terreno de juego por más de 322 días, tras sufrir una lesión en la rodilla izquierda.

Fati tuvo que pasar por el quirófano hasta en cuatro ocasiones, para poder dejar atrás las molestias físicas que presentó.

Cuando Lionel Messi abandonó la institución, Joan Laporta, presidente catalán, tenía claro que Ansu era el suplente idóneo del argentino. De hecho, la directiva tomó la decisión de darle la casaca ‘10′, en símbolo de confianza.

Y a su regreso el joven futbolista no decepcionó, ya que al minuto 81 de partido selló una vuelta espectacular, al marcar un gol que desahogó la frustración del equipo, que quedó sentido con la partida de Leo.

El heredero al trono

El 25 de agosto de 2019 llegó uno de los sueños mas importantes en la carrera de Ansu Fati.

Con tan sólo 16 años, la joven promesa del Barcelona debutó en el campo y la imagen que todos guardan de aquella noche es la “bendición” que Messi le dio.

Lionel se acercó al vestidor y con un abrazo le dio la bienvenida al primer equipo del Barcelona.

A partir de ahí, el ascenso de Fati ha sido a pasos agigantados. El equipo blaugrana comenzó a darle minutos y el talentoso jugador no lo desaprovechó en ningún momento.

De hecho, a menos de un mes de su debut, marcó su primer gol en Primera División y se lo hizo al Valencia.

Pero cuando la lesión llegó, el miedo quedó impregnado, porque muchos jugadores jóvenes no han podido recuperarse al 100 de un golpe de tal envergadura.

Sin embargo, Ansu es un futbolista con muchos deseos de trascender, por lo que las esperanzas del conjunto culé ahora se postran en los hombros de un chico de 18 años, que quiere emular los pasos de su ídolo, Messi.