BEIRUT (AP) — El Programa Mundial de Alimentos de la ONU ha aumentado su asistencia alimentaria al Líbano a fin de alimentar a un tercio de la población en medio de la aguda crisis económica que sufre el pequeño país, se informó el lunes.
Líbano está sufriendo la peor crisis económica y financiera de su historia moderna. Tres cuartas partes de su población han caído en la pobreza desde fines de 2019. La libra libanesa ha perdido más del 90% de su valor frente al dólar y los precios de alimentos padecen una de las peores inflaciones del mundo.
Líbano tiene una población de aproximadamente 6 millones de habitantes, entre ellos 1 millón que son refugiados sirios que han huido de la guerra civil en su país.
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El PMA anteriormente había asignado 700 millones de dólares en asistencia alimentaria al Líbano cada año, y en 2022 aumentó la cifra a 1.300 millones. Ahora ha presupuestado 5.400 millones de dólares para los próximos tres años, aumentado su asistencia alimentaria anual en 500 millones.
El nuevo presupuesto le permitirá al organismo de Naciones Unidas alimentar a unas 2 millones de personas, divididas por igual entre refugiados libaneses y libaneses vulnerables.
“Los precios de los alimentos en el Líbano son 16 veces más altos de lo que eran en octubre de 2019 antes del estallido de la actual crisis financiera”, indicó a The Associated Press, Rasha Abou Dargham, portavoz del PMA.
“Los ingresos familiares no bastan para poder pagar los altos precios de los alimentos y otros artículos de primera necesidad”, añadió.
El primer ministro interino del Líbano
Najib Mikati, tras reunirse con el director del PMA en el país Abdallah Alwardat, dijo en un comunicado que había insistido en aumentar el número de libaneses beneficiados por la asistencia alimentaria.
El PMA envía paquetes de comida a familias y trabaja con agricultores y pequeñas empresas, pero también se coordina con el gobierno libanés para aplicar un programa de emergencia a familias vulnerables que es actualmente financiando por el Banco Mundial.
